Escala 1:32 Fabricante Lindberg (Puntuación del kit: 4/10)
HISTORIA
El inventor de las LCVP fue Andrew Higgins (28 de agosto de 1886 – 1 de agosto de 1952). En 1926, cuatro años después de la fundación de la Higgins Lumber and Export Co. que había inventado y perfeccionado un barco de trabajo, conocido como el modelo 'Eureka', diseñado para trabajar en los pantanos y ciénagas del sur de Louisiana. El barco de poco calado, podía operar a tan sólo 18 centímetros de agua, también podría navegar hasta la orilla sin sufrir daños.
Se trataba de un empresario imaginativo, pertinaz y “ecléctico”. Durante la depresión, su astillero no dejó de facturar. Convenció a los contrabandistas de ron (procedente de Cuba) para que comprasen sus rápidos barcos y burlar así a los guardacostas. A éstos los convenció también para que comprasen sus barcos con los cuales medirse a los delincuentes. Así, a pesar del hundimiento de la economía americana que sumió al país en una crisis mayúscula, el emprendedor Higgins sacó su factoría adelante. Higgins, sabedor que la Armada necesitaría lanchas de desembarco, deseaba conseguir un contrato suculento para la construcción de las barcazas de asalto.
Partía con ventaja respecto a sus competidores, entre los que se encontraban los grandes astilleros, porque él ya contaba con un diseño: la lancha capacitada para navegar por el Mississippi, a la cual denominaba Eureka. Su lancha, de reducido calado y con un original diseño de timón escamoteado, podía navegar sobre obstáculos sumergidos o flotantes. Higgins presentó su diseño a la Armada, pero fue rechazado. Sin amilanarse, organizó y financió por su cuenta unas pruebas de demostración para los militares. El éxito fue espectacular, siendo aceptado de inmediato. Aunque, la Armada impuso una condición. Debería rediseñarse la proa puesto que en el diseño de la Eureka, los soldados debían desembarcar saltando de los costados, lo cual era lento y exponía a los soldados, además que impedía el transporte de otro tipo de vehículos.
Debería rediseñarlo en 72 horas. Higgins reunió a sus ingenieros y se propusieron no abandonar la fábrica hasta encontrar la solución. Esa misma tarde, uno de ellos le expuso su diseño de portón frontal basado en una idea que tuvo con una caja de puros. La idea gustó a la Armada y Higgins se quedó con el contrato. El nuevo barco tenía una longitud de 11 metros, una anchura de 3 e iba propulsado por un motor diesel. Pero surgió un nuevo problema: la escasez de acero para fabricar las 9000 barcazas solicitadas en los próximos 2 años. La solución la aportó el propio Higgins. En 1939 había tenido la previsora idea de adquirir toda la producción de caoba de las Filipinas. Propuso a la Armada su construcción en ese material, más barato y fácil de emplear para la fabricación de las lanchas. Aplicó la producción en cadena de Ford y sus barcas salían a un ritmo trepidante de las fábricas, cumpliendo así con el objetivo impuesto en el contrato.
Semejante producción no pasó desapercibida para los espías alemanes, motivo por el cual el Gobierno le asignó protección con guardaespaldas. La información sobre su diseño y materiales empleados fueron empleados pues por los alemanes para instalar las contramedidas en las playas. Eisenhower dijo de Higgins que “Fue el hombre que nos hizo ganar la guerra”
ESPECIFICACIONES TÉCNICAS
Material de Construcción: Madera (Roble, Pino y Caoba).
Tipo: Lancha de Transporte a Tierra de Vehículos y Tropas.
Desplazamiento: 8.200 kg.
Dimensiones: Longitud: 11.05 m // Manga: 3.30 m // Calado: 0,91 m en popa y 0.66 m en proa.
Propulsión: Un Motor Diésel de 225 CV (168 kW) o un Motor de Gasolina de 250 CV (186 kW).
Velocidad: 12 nudos (22 km/h).
Capacidad: 6.000 libras (2.700 kg) del vehículo o 8.100 libras (3.700 kg) de carga general.
Tropas: 36 soldados.
Tripulación: 3 Hombres.
Armamento: 2 Ametralladoras del 0,30 cal (7,62 mm).