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Para comprender el significado del título hay que recordar que el buque origen del acorazado moderno, el Dreadnought, marcó un hito en la combinación de poder naval y tecnología. En su caso, se advierte una ruptura radical con el lento proceso de evolución que había llevado gradualmente al desarrollo del buque de guerra desde las galeras Salamina y Actio hasta el galeón y desde allí al buque de línea nelsoniano, para luego incorporar el vapor y el acero en su diseño y propulsión. Con el Dreadnought, por primera vez, se abandonaba el uso tradicional y se lo reemplazaba por los limites de la tecnología vigente, nacía por tanto el concepto de State of the Art.
Pero ¿qué es aquello que transformó el poder naval del mundo contemporáneo? El Dreadnought pudo ser un buque más de los cientos que se construían en la principal potencia del mundo durante los primeros años del siglo XX. Sin embargo, cuando la quilla de este buque simultáneamente conoció la mar y a la bandera británica en 1905, su sola existencia presagiaba una nueva competencia por el poder y el predominio marítimo mundial. Con él nacían los acorazados monocalibres, naves que revolucionaban la clásica construcción de buques capitales. Su armamento monocalibre permitía el tiro por salvas, lo que hasta esa época sólo había sido teoría; su andanada superaba en 600 Kg. a la de sus contemporáneos. Con su gran alcance, podía imponer el combate a larga distancia con sus piezas pesadas que, hasta entonces, sólo se empleaban para rematar de cerca a los buques enemigos previamente averiados por la artillería media. Con este hecho, cada país que se preciaba de importante, vio con asombro el gran avance tecnológico de la marina británica e inició el desarrollo de sus propias variedades de la nueva maravilla de la tecnología, en lo posible, mejorando el modelo original. Con lo anterior, a partir de 1905 poseer un acorazado tipo Dreadnought significó asegurarse el prestigio de poseer el buque mas sofisticado del mundo, que aparte de entregar a su Marina de Guerra el poder físico de disuación y fuerza, donaba además importantes laureles a la totalidad de la industria nacional del país dispuesto a asumir este desafío.
Debe pues señalarse que poseer un acorazado de este tipo significaba para las empresas siderúrgicas el desarrollo de aceros de blindaje más sofisticados y resistentes; para sus arsenales significaba trabajar arduamente en el diseño de artillería y proyectiles cada vez más potentes y poderosos y a su industria óptica le permitía desarrollar sistemas de control de fuego y telémetro más precisos. De cierta manera, y como tan bien lo planteara aquel testigo y nostálgico sobreviviente de aquella época, el Profesor Dr. Oscar Parkes, el Dreadnought fue " la más superlativa creación del hombre que jamás haya surcado las olas".
Pero más allá de esta razón de prestigio, en último término estos buques tenían que ser capaces de cumplir una misión mucho más específica y directa que el solo hecho de transmitir una sensación de orgullo en las paradas navales, y es quizás este mismo hecho real, el que los convertía en medidores tan eficientes del poder nacional.
La potencialidad que se medía en los acorazados a partir del tipo Dreadnought era a través del fuego de su artillería, que en términos comparativos, debía destruir a su potencial adversario, mientras que por otra parte, a través de su blindaje, la nave debía resistir de la mejor forma el fuego equivalente del enemigo. De lo antes expuesto, podemos afirmar que el acorazado se resumía, primordialmente, en una combinación de potencia de fuego sumado a un Staying power, término Británico que resume la capacidad de resistir la acción destructora enemiga mediante una combinación de resistencia pasiva y maniobra.La velocidad, otra variable de vital importancia, encontró en los Dreadnoughts una medida Standard, por cuanto requería tener presente las restricciones y concesiones que implicaba cualquier diseño, enfatizando siempre la potencia de fuego y el blindaje antes mencionado.
Pero
antes de entrar a visualizar en detalle las características de nuestro
objeto de estudio, hay que hacer hincapié en que su primera gran virtud
la representa su armamento. Mientras hasta su época, las unidades
pesadas de cualquier marina dividían su artillería principal en dos
calibres, en este buque el armamento se concentraba en uno solo. La
antigua división en cañones para "hundir acorazados", universalmente
aceptados como de calibre 12 pulgadas (305 mm), embarcados normalmente
en numero de cuatro, en torres o montajes a proa y popa, eran
acompañados por cañones menores para "hundir destructores", de calibres
que iban entre las 4 pulgadas (101´6 mm) hasta las 6 pulgadas (152 mm).
Dispuestos normalmente en las bandas. La razón para esta selección
estaba dada en que los cañones de más grueso calibre tenían una cadencia
de tiro extraordinariamente baja, normalmente no superior a un disparo
en más de un minuto, lo que impedía realmente una precisión digna de tal
nombre en el fuego a larga distancia. De esa manera, los cañones
menores, de mayor velocidad de tiro, en virtud a su fácil carga y
puntería, se encargaban de "lisiar" a adversario, destruyéndole su
artillería u otros elementos expuestos para luego permitir una
aproximación a corta distancia para que las piezas de grueso calibre
asumieran su rol de destrucción final. Los Dreadnought eliminarían esta
distinción, concentrándose sólo el poseer el calibre más grueso -de ahí
la denominación de "monocalibres"-, que merced al desarrollo de la
tecnología, habían logrado aumentar en algo su velocidad de tiro. De
esta manera, se confiaba en que con solo unos pocos impactos, el enemigo
sería hundido, además de que permitía entrar en combate a mayores
distancias, aprovechando así las ventajas del desarrollo reciente en
sistemas ópticos de puntería y control de fuego. Sin dudas, en este
planteamiento teórico, que pudo ser llevado a la práctica, los nuevos
buques a partir de 1905, marcaron el inicio de una nueva época en la
construcción naval de buques capitales.
Obviamente,
este desafío iniciado por Gran Bretaña, tal como lo señalamos, no podía
permanecer sin respuesta, y es así que rápidamente las demás potencias
de Europa EEUU. y Japón pronto se lanzaron a una nueva competencia, en
cuanto el nuevo invento había obligado a todas las marinas a partir de
cero con respecto a buques capitales. Al enorme proceso de diseño y
construcción corresponde en parte importante el periodo de la paz
armada, imprimiendo la dinámica nacionalista que precipitó al mundo
pocos años más tarde en los horrores de la Primera Guerra Mundial.
Siguiendo las teorías y los estudios del italiano Vittorio Cuniberti y el empeño y los conceptos operativos de sir John Fisher, el día 2 de Octubre de 1905 se puso la quilla del HMS Dreadnought, primer acorazado monocalibre del mundo. La botadura tuvo lugar el 10 de Febrero del año siguiente y, tras una prodigiosa rapidez en los trabajos de alistamiento, el buque estuvo terminado menos de un año después, prueba evidente del entusiasmo e interés que su construcción despertó entre militares, técnicos y maestranzas civiles.
Casco y superestructuras
El casco del Dreadnought tenía un largo castillo que daba a la proa una altura de bordas de 8´5 m. El castillo progresaba hacia popa para unirse a la toldilla, a fin de permitir el tiro "hacia delante" de las torres principales de 305 mm. en posición lateral. El conjunto castillo-toldilla se extendía por casi la mitad del buque.
Las líneas del casco, particularmente afinadas a proa y macizas a media eslora a fin de convertirlo en una plataforma verdaderamente estable, contribuían sensiblemente a la velocidad del buque (que alcanzaba los 21 nudos), aun contando con un aparato motor que desarrollaba tan solo 23.000 hp. La proa, de acuerdo con la tradición, terminaba en un espolón redondeado, mientras la popa era del tipo crucero. La maniobrabilidad quedaba asegurada por dos timones compensados paralelos, que actuaban detrás de las hélices y, obviamente, de las cuatro líneas de ejes.
Uno de los rasgos distintivos del buque era un gran palo trípode a popa de la chimenea proel, lo cual, debido a los humos de ésta, comportaba consecuencias negativas para la visibilidad desde la cofa del propio palo y para la señalización con banderas. Por otra parte, la posición de esta chimenea proel era demasiado cercana al puente de mando, en el que provocaba problemas de habitabilidad. Entre las torres popeles de 305 mm. se encontraba un segundo palo trípode, más pequeño y también con cofa. En ambos palos se hallaban instalados los telémetros principales.
La altura metacéntrica de la unidad era de 1´546 m. cifra demasiado alta que, si bien mejoraba la estabilidad (favorecida también por la especial forma del casco a la altura de la sección maestra), daba un momento de adrizamiento muy breve durante el balance. Para la dotación, el Dreadnought resultaba un buque de habitabilidad incómoda y dura.
A fin de hacerse una idea aproximada de las características del primer buque de batalla moderno, es interesante conocer sus diferentes exponentes de carga en el momento de su entrada en servicio:
Casco: 6.100 tm
Protección 5.000 tm
Armamento 3.100 tm
Aparato motor 2.050 tm
Otros pesos 1.650 tm
Protección
Cerca del 28% del peso del Dreadnought en desplazamiento a carga normal se debía a la protección: 5.000 toneladas de blindaje. La protección de los pañoles de munición residía en los mamparos internos de 500 mm. de espesor, mientras la protección de los pañoles de las dos torres dispuestas sobre los costados era de 102 mm, valor ciertamente exiguo, tratándose de pañoles situados junto a los costados.
La protección subacuática estaba confiada a dos mamparos longitudinales (uno por banda) antitorpedos y no acorazados. En cuanto a los mamparos divisorios, que se alzaban hasta 2´75 m sobre la flotación, no tenían aberturas para puertas estancas. Esta medida, al menos de forma teórica, debía permitir encajar la explosión de dos torpedos en cualquier zona del casco. Por otra parte, el buque disponía asimismo de redes contra torpedos, por entonces muy en boga y de uso casi generalizado, dotadas de sus respectivos botavantes.
En conjunto, la protección del Dreadnought fue considerada suficiente, pero no excesiva. Posteriores experiencias bélicas demostrarían que una protección de esas características resultaba insuficiente. Las 5.000 toneladas de blindaje estaban distribuidas, entre las diversas zonas vitales, del siguiente modo:
Cintura 1.950 tm
Cubierta 1.350 tm
Pañoles de munición 250 tm
Aparato motor 100 tm
Torres de grueso calibre 1.260 tm
Puesto de mando 100 tm
Siguiendo las teorías y los estudios del italiano Vittorio Cuniberti y el empeño y los conceptos operativos de sir John Fisher, el día 2 de Octubre de 1905 se puso la quilla del HMS Dreadnought, primer acorazado monocalibre del mundo. La botadura tuvo lugar el 10 de Febrero del año siguiente y, tras una prodigiosa rapidez en los trabajos de alistamiento, el buque estuvo terminado menos de un año después, prueba evidente del entusiasmo e interés que su construcción despertó entre militares, técnicos y maestranzas civiles.
Casco y superestructuras
El casco del Dreadnought tenía un largo castillo que daba a la proa una altura de bordas de 8´5 m. El castillo progresaba hacia popa para unirse a la toldilla, a fin de permitir el tiro "hacia delante" de las torres principales de 305 mm. en posición lateral. El conjunto castillo-toldilla se extendía por casi la mitad del buque.
Las líneas del casco, particularmente afinadas a proa y macizas a media eslora a fin de convertirlo en una plataforma verdaderamente estable, contribuían sensiblemente a la velocidad del buque (que alcanzaba los 21 nudos), aun contando con un aparato motor que desarrollaba tan solo 23.000 hp. La proa, de acuerdo con la tradición, terminaba en un espolón redondeado, mientras la popa era del tipo crucero. La maniobrabilidad quedaba asegurada por dos timones compensados paralelos, que actuaban detrás de las hélices y, obviamente, de las cuatro líneas de ejes.
Uno de los rasgos distintivos del buque era un gran palo trípode a popa de la chimenea proel, lo cual, debido a los humos de ésta, comportaba consecuencias negativas para la visibilidad desde la cofa del propio palo y para la señalización con banderas. Por otra parte, la posición de esta chimenea proel era demasiado cercana al puente de mando, en el que provocaba problemas de habitabilidad. Entre las torres popeles de 305 mm. se encontraba un segundo palo trípode, más pequeño y también con cofa. En ambos palos se hallaban instalados los telémetros principales.
La altura metacéntrica de la unidad era de 1´546 m. cifra demasiado alta que, si bien mejoraba la estabilidad (favorecida también por la especial forma del casco a la altura de la sección maestra), daba un momento de adrizamiento muy breve durante el balance. Para la dotación, el Dreadnought resultaba un buque de habitabilidad incómoda y dura.
A fin de hacerse una idea aproximada de las características del primer buque de batalla moderno, es interesante conocer sus diferentes exponentes de carga en el momento de su entrada en servicio:
Casco: 6.100 tm
Protección 5.000 tm
Armamento 3.100 tm
Aparato motor 2.050 tm
Otros pesos 1.650 tm
Protección
Cerca del 28% del peso del Dreadnought en desplazamiento a carga normal se debía a la protección: 5.000 toneladas de blindaje. La protección de los pañoles de munición residía en los mamparos internos de 500 mm. de espesor, mientras la protección de los pañoles de las dos torres dispuestas sobre los costados era de 102 mm, valor ciertamente exiguo, tratándose de pañoles situados junto a los costados.
La protección subacuática estaba confiada a dos mamparos longitudinales (uno por banda) antitorpedos y no acorazados. En cuanto a los mamparos divisorios, que se alzaban hasta 2´75 m sobre la flotación, no tenían aberturas para puertas estancas. Esta medida, al menos de forma teórica, debía permitir encajar la explosión de dos torpedos en cualquier zona del casco. Por otra parte, el buque disponía asimismo de redes contra torpedos, por entonces muy en boga y de uso casi generalizado, dotadas de sus respectivos botavantes.
En conjunto, la protección del Dreadnought fue considerada suficiente, pero no excesiva. Posteriores experiencias bélicas demostrarían que una protección de esas características resultaba insuficiente. Las 5.000 toneladas de blindaje estaban distribuidas, entre las diversas zonas vitales, del siguiente modo:
Cintura 1.950 tm
Cubierta 1.350 tm
Pañoles de munición 250 tm
Aparato motor 100 tm
Torres de grueso calibre 1.260 tm
Puesto de mando 100 tm
Aparato motor
La adopción de un aparato motor a base de turbinas Parsons permitió, a paridad de potencia, un notable ahorro de peso, respecto a las máquinas alternativas de los acorazados precedentes. La introducción de dichas turbinas fue idea del propio Fisher, que contó con el apoyo de Parsons, su constructor. Esta instalación resultó un gran éxito, que hubiera sido aún mayor si las calderas (debido al temor del Almirantazgo respecto a las disponibilidades de nafta) no hubiesen sido de combustión mixta.
Los consumos referentes a la potencia desarrollada eran muy bajos a mucho andar y demasiado elevados a poca velocidad: 17´5 toneladas por hora a 23.000 hp, y 11 toneladas por hora a 10.000 hp. Los resultados obtenidos durante la fase de proyecto y en las pruebas efectuadas en el canal de Haslar fueron valoradas de manera tan satisfactoria, que el famoso arquitecto naval Foudre no se avino a creer que una potencia tan limitada permitiese una velocidad superior a los 20 nudos. Cuando el Dreadnought fue objeto de las pruebas a plena potencia, alcanzó los 22´4 nudos, con una potencia de 24.700 hp.
Armamento
La autentica razón de ser del Dreadnought residía, junto con el aparato motor, en el armamento, con una solución monocalibre para la artillería principal, tal y como había sostenido Cuniberti y demostrado la batalla de Tsushima.
Para este buque se optó por la disposición de las diez armas de 305/45 mm en torres dobles, tres en crujía y dos laterales, de modo que estas últimas pudiesen disparar, en teoría, tanto por popa como por proa. Obviamente, la deflagración propia de estas piezas no permitía el tiro simultáneo en sentido longitudinal al buque de las dos torres laterales. Ello comportó que, tanto por popa como por proa, el fuego correspondiese siempre a cuatro cañones (de los que dos debían pertenecer a una de las torres en crujía) y nunca tirando exactamente sobre el eje longitudinal, sino con una inclinación de algunos grados.
La artillería principal no era de nuevo modelo y no fue estudiada para ser embarcada en un buque absolutamente nuevo, tanto constructiva como conceptualmente. A fin de ahorrar tiempo para el alistamiento, se emplearon las piezas preparadas para dos acorazados de la clase Lord Nelson.
La artillería secundaria de 76/50 mm. fue distribuida por toda la extensión del casco: algunas piezas se instalaron en el techo de las torres principales y otras en distintos sectores del buque. Los cañones dispuestos en el techo de la torre principal proel fueron dotados más tarde de un escudo trasero para sustraer el puente de mando de los efectos de las deflagraciones.
Una característica curiosa en el armamento de este buque estribaba en la presencia - además de los 23 torpedos de 457 mm. para los tubos de lanzar embarcados - de 6 ingenios de 356 Mm., que debían emplearse por las embarcaciones de vapor de a bordo, convertidas en torpederas. Sin embargo, esta solución no fue nunca aplicada.
El buque disponía de dos direcciones de tiro, de las que la segunda se hallaba entre las chimeneas. Los telémetros principales se encontraban en los palos trípodes, que, respecto de los convencionales, eran más elásticos y transmitían menos vibraciones. El número de proyectores era de 13.
Actividad
En enero de 1906 navegó hacia el Mediterráneo y desde allí a Puerto España, Trinidad, en donde lejos de la mirada crítica de sus detractores ingleses y fuera de la vista de rivales extranjeros, sus motores y armas fueron objeto de un entrenamiento cuidadoso por parte del capitán sir Reginald Bacon. Su informe demostró el éxito del diseño. “Ningún miembro del comité de diseños,” escribió, “se hubiese atrevido a aventurar que todas las innovaciones introducidas en el buque habrían resultado tan exitosas”. Tras su entrada en servicio, el Dreadnought se convirtió en buque insignia del comandante en jefe de la Metropolitan Fleet de Abril de 1907 a Mayo de 1912. Al estallar la IGM pasó a ser buque insignia de la 4ª división de buques de batalla hasta Mayo de 1916. El 18 de Febrero de 1915 embistió y hundió al submarino alemán U-29, al mando del mítico Otto Weddigen y autor del hundimiento de los cruceros Aboukir, Cressy, Hogue y Hawke. La Royal Navy había tomado cumplida venganza. Después de la incursión de la flota alemana contra Lowestoft, y debido a que su baja velocidad le impedía guardar la formación con el resto de la línea, fue transferido a la desembocadura del Támesis para asegurar la defensa de la zona, asumiendo el papel de buque insignia de la 3ª división. Puesto en la reserva en Rosyth a mediados de Febrero de 1919, le fueron definitivamente apagadas las calderas en 1920 y vendido para el desguace en 1922 a T. Ward & Company. Partió para Inverness en 1923, donde fue desguazado.
En enero de 1906 navegó hacia el Mediterráneo y desde allí a Puerto España, Trinidad, en donde lejos de la mirada crítica de sus detractores ingleses y fuera de la vista de rivales extranjeros, sus motores y armas fueron objeto de un entrenamiento cuidadoso por parte del capitán sir Reginald Bacon. Su informe demostró el éxito del diseño. “Ningún miembro del comité de diseños,” escribió, “se hubiese atrevido a aventurar que todas las innovaciones introducidas en el buque habrían resultado tan exitosas”. Tras su entrada en servicio, el Dreadnought se convirtió en buque insignia del comandante en jefe de la Metropolitan Fleet de Abril de 1907 a Mayo de 1912. Al estallar la IGM pasó a ser buque insignia de la 4ª división de buques de batalla hasta Mayo de 1916. El 18 de Febrero de 1915 embistió y hundió al submarino alemán U-29, al mando del mítico Otto Weddigen y autor del hundimiento de los cruceros Aboukir, Cressy, Hogue y Hawke. La Royal Navy había tomado cumplida venganza. Después de la incursión de la flota alemana contra Lowestoft, y debido a que su baja velocidad le impedía guardar la formación con el resto de la línea, fue transferido a la desembocadura del Támesis para asegurar la defensa de la zona, asumiendo el papel de buque insignia de la 3ª división. Puesto en la reserva en Rosyth a mediados de Febrero de 1919, le fueron definitivamente apagadas las calderas en 1920 y vendido para el desguace en 1922 a T. Ward & Company. Partió para Inverness en 1923, donde fue desguazado.
Características
Astilleros Arsenal de Portsmouth
Colocación de la quilla 02-10-1905
Botadura 10-02-1906
Alistamiento 03-12-1906
Baja 31-03-1920
------
Desplazamiento normal 17.900 tm
Desplazamiento plena carga 21.845 tm
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Dimensiones Eslora total: 160´6 m
Eslora entre pp: 149´3 m
Manga 25 m
Calado 8 m
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Aparato motor 18 calderas Babcock & Wilcox de combustión mixta
2 grupos de turbinas Parsons a 4 hélices
Potencia 23.000 hp
Velocidad 21 nudos
Combustible 2.900 tm de carbón + 1.120 tm de nafta
Autonomía 6.620 millas a 10 nudos
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Armamento 10 de 305/45 Mm.
27 de 76/50 mm
5 tlt de 457 mm
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Protección vertical máxima 280 Mm.
Protección horizontal máxima 76 Mm.
Protección artillería máxima 280 Mm.
Protección puesto de mando máx 280 Mm.
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Dotación: 773 tripulantes y oficiales
Naturalmente,
dicho desafío en la ingeniería naval no podía quedar si contestación
por parte de las demás potencias navales. Los Estados Unidos habían
diseñado ya el USS Michigan y South Carolina, que montaron ocho armas 12
pulgadas en cuatro torres situadas en la línea de crujía. Aunque ambas
quillas fueron colocadas después de la botadura del Dreadnought .
Alemania respondió inmediatamente al desafío británico con las órdenes para cuatro Nassau. Las naves de esa clase montaban doce cañones de 11´3 pulgadas.
Y en Italia en 1907 colocaron el Dante Alighieri, la primera nave en montar torres triples en la línea de crujía.
Alemania respondió inmediatamente al desafío británico con las órdenes para cuatro Nassau. Las naves de esa clase montaban doce cañones de 11´3 pulgadas.
Y en Italia en 1907 colocaron el Dante Alighieri, la primera nave en montar torres triples en la línea de crujía.
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